A medida que la transformación digital se acelera, la ciberseguridad se ha convertido en una prioridad estratégica para las organizaciones, que reconocen la importancia de proteger sus sistemas, datos y empleados en un mundo cada vez más digital

Un informe publicado por Statista muestra que la pandemia de Covid-19 generó situaciones que favorecieron el crecimiento de los ciberataques y de la ciberdelincuencia en líneas generales, y como contramedida a esta realidad, las empresas invirtieron en más recursos para ampliar las herramientas de la ciberseguridad y, para este 2023, se espera llegar a los 162 mil millones dólares en inversión.

El reporte indicó que una de las causas para la disminución del delito en el 2022 fue la inversión por parte de las empresas en la ciberseguridad. Los datos indican que el sector recibió un financiamiento en América del Norte de unos 68 mil millones de dólares.

“En 2023, se espera que el mercado global de ciberseguridad alcance un ingreso total de 162 mil millones de dólares, siendo los Servicios de Seguridad el segmento más grande, representando aproximadamente el 53% de ingresos mundiales en aproximadamente 86 mil millones de dólares. Estados Unidos generará los mayores ingresos en el mercado de ciberseguridad en 2023 con 69 mil millones de dólares, seguido de China con 14 mil millones de dólares y el Reino Unido con aproximadamente 10 mil millones de dólares” expresó Phuong-Ha Nguyen, analista de Statista y especialista en el campo del delito cibernético.

Cantidad de ciberataques - Fuente: Statista

La gráfica muestra cómo durante los años 2019, 2020 y 2021 el crecimiento de los delitos cibernéticos fue exponencial, esto impulsado principalmente por la digitalización forzada de servicios y de puestos de trabajo que la pandemia obligó a modificar.

El phishing ha sido el delito que más ha crecido en el mismo período. De tal manera que, según los datos aportados desde Statista Technology Market Insights, más del 50% de delitos reportados son phishing y justamente estos números muestran que ya no únicamente se queda en mera actuación que pueda tener un especialista informático, sino que se ha convertido en una inversión estratégica en las empresas para estar preparadas ante estos posibles ataques. 

Pese a ello, el informe también remarca que: “Las empresas deben reconocer la importancia de la ciberseguridad y tomar las medidas adecuadas para proteger sus sistemas, datos y empleados de los riesgos potenciales de los ataques cibernéticos. Al hacerlo, pueden asegurarse de poder operar de manera efectiva y segura en un mundo cada vez más digital”.

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